Como toda profesión expuesta a cambios, la extinción de incendios está en una constante evolución. Esto se ha acelerado en los últimos años debido a los aportes tecnológicos y mejoras en el equipo de protección personal (EPE o PPE) para situaciones estructurales y de proximidad. Como el algodón ya no se usa, ahora cuentas con materiales más sofisticados para tu vestimenta.
Junto a los cambios en trajes de bomberos, herramientas resistentes al fuego y protección contra químicos, la dinámica del fuego también ha sido alterada. Hoy día los apagafuegos deben enfrentarse a incendios más voraces producto de nuevos materiales que ahora son más comunes. Hace 20 años, la madera tenía mayor presencia, pero ahora gran parte de los productos son sintéticos, lo cual ha incidido en las medidas contraincendios.
Aunque la evolución de cada profesión resulta inevitable, muchos bomberos deben estar conscientes sobre la necesidad de mantener su equipamiento limpio frente a los múltiples riesgos que enfrentan. Dadas estas nuevas condiciones, los cuarteles y departamentos tienen que conocer bien lo que recomienda la versión 2019 de la NFPA 1851.
Orígenes de la NFPA 1851
La NFPA 1851 es la norma asociada con la selección, cuidado y mantenimiento del equipo de protección para incendios estructurales y de proximidad. En principio fue un documento de carácter voluntario que fue elaborado por varias organizaciones. En esa época, la asociación estaba más preocupada por los estándares de los productos.
Esto cambiaría en 2007, cuando la NFPA empezó a investigar más sobre las consecuencias relacionadas con el mantenimiento y cuidado del PPE. Ya que estas normas son actualizadas cada 5 años, la última revisión de la 1851 ocurrió en 2019. No obstante, proveedores independientes, fabricantes y organizaciones tienen un año para conseguir la certificación.
Importancia de mantener y limpiar la protección contra fuego
A pesar de que la nueva NFPA 1851 incluye modificaciones relevantes en varios temas, el cambio más sustancial aborda el aseo del equipamiento de protección personal. Un ejemplo de esto es la sustitución del término «limpieza de rutina» en la edición 2014 por «reducción de la exposición preliminar», que aparece en la última versión.
En la práctica esto apunta a que como bombero deberías priorizar tu seguridad estando muy pendiente de las condiciones de tu equipo. Esto quiere decir que debes cuidarlo bien y mantenerlo funcional para que haga su trabajo. La terminología nueva amplía el uso de técnicas para reducir la contaminación y la cantidad de sucio asociadas con la extinción de incendios.
También hay definiciones nuevas para instalación de limpieza, descontaminación bruta y desinfectante. Además, las definiciones de contaminación, descontaminación, desinfección, limpieza avanzada/especializada y nivel de sucio han sido revisadas para estar a tono con las actualizaciones de la NFPA 2019.
Hay que entender que esta normativa tiene la finalidad de establecer criterios básicos para elegir, inspeccionar, reparar, limpiar y descontaminar el equipo contra incendios. Junto a esto, también hay recomendaciones sobre almacenamiento, retiro y sistemas de verificación. Adicionalmente, incluye un método nuevo para medir la efectividad del aseo.
Cómo probar la efectividad del proceso de limpieza
En la redacción anterior de la NFPA 1851, estaba indicado que el aseo del equipo debía realizarse una vez al año. Ahora, por razones de precaución, el lavado apropiado del traje de bombero y el resto del EPP debe hacerse un mínimo de 2 veces al año. Adicionalmente, uno de esos procedimientos tiene que realizarse en combinación con una inspección avanzada.
En la edición de 2014, se menciona la necesidad de ejecutar una revisión completa del recubrimiento interno al tercer año de uso del equipamiento. En la versión 2019, agregaron la recomendación de hacer dicha inspección cada 12 meses después del testeo inicial. Junto a esto, hay una forma de medir la efectividad de la limpieza, la cual sigue 8 pasos:
- Hay que preparar y enviar una muestra representativa al laboratorio.
- La gente del laboratorio se encargará de contaminar la muestra con varios químicos.
- Luego la muestra adulterada es empaquetada en un kit y mandada de regreso para verificar la efectividad de la limpieza.
- Al llegar, la muestra es puesta en una prenda sustituta.
- Seguidamente, la prenda sustituta con la muestra adentro debe ser lavada de acuerdo al protocolo del cuartel/destacamento.
- Una vez terminado el lavado, se extrae la muestra de la prenda sustituta, se guarda en el kit y se manda a un laboratorio cualificado.
- Los encargados analizarán la muestra para establecer los diferentes niveles de contaminación.
- Al final, el laboratorio proporciona los resultados sobre cuánto agente contaminante fue removido de la muestra sustituta.
De igual forma, hay una nueva categoría de limpieza en la última versión de la normativa. Según la edición anterior, había que ser ISP o fabricante verificado para ofrecer una limpieza avanzada. Ya que la nueva NFPA 1851 incluye otra jerarquía, cualquier empresa que tenga un procedimiento avalado tiene la autorización para llevarlo a cabo.
Hay otro cambio significativo en la edición 2019 y está relacionado con la revisión de las top-loaders. En este estándar actualizado existe una advertencia sobre utilizar lavadoras con puerta horizontal que tengan o no un agitador central. En cambio, hay que emplear un extractor de lavado para depurar la prendas porque es más efectivo.
Duración del traje de bomberos
La NFPA 1851 habla sobre la caducidad que puede tener un traje para bomberos y las circunstancias que pueden acelerar o retardar este proceso. Mientras que la teoría estipula que debes cambiar esta protección contra fuego cada 10 años, en la práctica el reemplazo puede depender de factores como:
- Estrés térmico o mecánico
- Exposición a sustancias peligrosas
- Cuidado y mantenimiento del equipo
- Uso y almacenamiento del bombero propietario
- Composición (calidad) de la vestimenta contraincendios
Observaciones generales sobre el lavado apropiado
La recomendación principal sobre la NFPA 1851 es que conozcas esos aspectos fundamentales sobre el cuidado, mantenimiento y almacenamiento del traje de bombero y el resto del PPE. Como aquí no podemos abarcarlo todo, nos limitaremos a algunas cuestiones generales que no dejan de ser importantes.
Productos de limpieza
En esta categoría existen 2 clases de productos que puedes utilizar para lavar tus prendas contra fuego: detergentes y jabones. Lo más aconsejable son los detergentes líquidos debido a su mayor grado de solubilidad y al hecho de que tienen una menor tendencia a quedarse pegados a la vestimenta destinada a la extinción de incendios.
Lavado del traje para bomberos
A la pregunta de cuándo debes lavar tu traje de bombero, te sugerimos que lo hagas después de constatar que presente algún tipo de contaminación/suciedad, una simulación real o un evento donde hayas tenido una exposición peligrosa. La comparación con uno nuevo te dirá qué tan limpio se ve.
En el supuesto de que no tengas un traje para bombero nuevo para cotejar, puedes chequear el recubrimiento interno, que suele verse más afectado. También puedes revisar aquellas secciones de la vestimenta en las cuales no aparece tanto desgaste, como debajo de donde van las cintas reflectantes.
Pretratamiento y quitamanchas
Antes que nada, hay que humedecer la mancha para luego aplicar el pretratamiento y dejarlo actuar por al menos media hora. Para complementar, puedes utilizar un cepillo de cerdas suaves. También tienes la opción de ponerle directamente el detergente que usas para el lavado general y seguir el procedimiento estipulado.
¿Qué pasa si la mancha es difícil de quitar?
Debido a la frecuencia de incendios forestales o estructurales, la exposición a diversas sustancias resulta inevitable. Las grasas, el gasoil y los aceites derivados del petróleo son manchas con muchas complicaciones. Esto es porque se evaporan lentamente y a medida que se van acumulando, pueden provocar la conducción térmica y/o la ignición de la vestimenta.
Adicionalmente, la acumulación de este tipo de manchas puede causar una absorción por contacto con la piel y provocar su irritación. Hay que tener mucho cuidado con esto porque aumenta el riesgo de cáncer, como sucede con las crestosas derivadas de la madera o alquitrán. Cuando no hay forma de eliminar estos residuos, lo mejor es desechar el traje de bombero.
Proceso de descontaminación
Cuando ocurre una contaminación peligrosa a causa de fluidos corporales, escombros o combustión, la recomendación consiste en rociar la vestimenta con agua y proceder al lavado rutinario. Si se trata de una patología, lo ideal es utilizar peróxido de hidrógeno al 3-6% o Lisoform en una concentración de 0,5 a 1%.
Con respecto a esto, la NFPA 1851 indica: «Si el traje de bombero ha sufrido una contaminación química, biológica o radiológica, debe ser inmediatamente separado y descontaminado. Si este procedimiento no fuera exitoso, tiene que ser retirado al acto de sus funciones y ser destruido«.
Como fabricantes de trajes de bomberos, protección contra químicos, EPP y otras herramientas para la extinción de incendios, seguimos insistiendo en que tu seguridad está antes que todo. Conocer la NAFP 1851 y otros estándares de la industria te ayuda a internalizar las mejores prácticas en tu profesión y reduce el riesgo de un retiro prematuro.
Referencias
- Calams, Sarah. (2019). What firefighters should know about NFPA 1851, 2020 Edition. 11 y 12 de febrero, 2022, de FireRescue1. Sitio web: https://www.firerescue1.com/fire-products/firefighting-gear/articles/what-firefighters-should-know-about-nfpa-1851-2020-edition-Bc7jmSrBTyp0Xagf/
- Sin autor. (2020). NFPA 1851 Selección, cuidado y mantenimiento del equipamiento de protección estructural. 11 y 12 de febrero, 2022, de RASA. Sitio web: https://rasaprotect.com/wp-content/uploads/2020/03/nfpa-1851-instructivo.pdf