La predicción del comportamiento del fuego se ha vuelto más valiosa para controlar el fuego y para evaluar el daño potencial a los recursos. Gracias al modelo matemático de Rothermel (1972) se hizo posible contar con una base cuantitativa para clasificar el peligro del incendio y predecir el comportamiento del fuego. Las colecciones de propiedades de los combustibles se conocen como “Modelos de combustibles” y se organizan en cuatro grupos: hierba, arbustos, madera y tala. Este articulo pretende ayudar al usuario a seleccionar un modelo de combustible para un área específica. Un cuadro de similitud permite al usuario relacionar los modelos de combustible de comportamiento del fuego con los modelos de combustible del sistema de clasificación de peligro de incendio. El gráfico también proporciona un medio para asociar los modelos de combustible del sistema de clasificación de peligro de incendio con una representación fotográfica de esos tipos de combustible.
Aspectos topográficos
La topografía es un elemento que los bomberos analizan con especial atención, sobre todo en incendios forestales. El fuego tiene la tendencia a propagarse con mayor rapidez ladera arriba que, al contrario. Esto sucede porque los combustibles en dicha dirección son precalentados con mayor eficiencia por la acción de las flamas y el calor. En adición a esto, mientras más inclinada la topografía y mayor la cantidad de combustible, el fuego arderá y se extenderá más rápido.
Durante las estaciones, los combustibles se secan antes en las pendientes que están al sur en comparación con las que están al norte. Las áreas bajas ubicadas entre crestas altas también influyen sobre el comportamiento incendiario.
Las configuraciones topográficas como las ‘chimeneas’, que representan desagües verticales en cualquier lado de una colina, pueden atraer las flamas velozmente mientras sube el aire caliente, incluso creando sus propias corrientes de aire. En su conjunto, la forma del terreno puede alterar el proceso de transferencia de calor, crear microclimas con humedad y modificar patrones climáticos.
Combustibles asociados con los incendios forestales
Podemos decir que el combustible representa cualquier fuente que provoque la ignición de una llama. Estos elementos ignífugos en ambientes forestales tienden a ser medidos en función de un eje vertical y otro horizontal. Los combustibles verticales están conformados por elementos que arden en el suelo, la superficie, la escalera y copas de árboles.
- Combustibles del suelo. Son aquellos que contienen materia orgánica, turba, raíces en descomposición y montículos de materia orgánica alrededor de árboles.
- Combustibles de escalera. Estos se caracterizan por pasar las llamas desde el terreno hacia las copas de los árboles y pueden ser arbustos altos y árboles pequeños a medianos con ramas que cuelgan a una altura baja.
- Combustibles de copas. Representan vegetación ignífuga que forma parte del follaje y ramas pequeñas pertenecientes al dosel forestal. Pueden estar desconectados o conectados. Las agujas de coníferas arden con mayor facilidad, velocidad e intensidad en comparación con árboles deciduos o de hojas anchas que no tienen resina o aceite.
- Combustibles en superficie. Estos elementos también están en el suelo e incluyen la capa herbácea, agujas, pequeños arbustos, ramas y troncos de árboles.
Los combustibles de superficie en áreas forestales abiertas son catalogados en función del tiempo que les toma aumentar o disminuir dentro de sí el nivel de humedad por 63%. En este sentido, encontramos elementos que arden en 1 hora, 10 horas, 100 horas, 1000 horas y 10,000 horas.
- Combustibles de 1 hora. Tienen un diámetro de ¼ de pulgada o menos y corresponde a vegetación ligera e incendiaria que reacciona muy rápidamente a los cambios climáticos.
- Combustibles de 10 horas. Poseen un diámetro entre ¼ a 1 pulgada y están conformados por pequeños fragmentos de materia orgánica, extremos pequeños y ramas.
- Combustibles de 100 horas. Se distinguen por un diámetro de 1 a 3 pulgadas y su capacidad de arder suele estar determinada por las condiciones ambientales en un lapso de 24 hrs.
- Combustibles de 1000 horas. Cuentan con un diámetro de 3 a 8 pulgadas y su combustibilidad tiende a estar sujeta al promedio semanal de condiciones climáticas.
- Combustibles de 10,000 horas. Están conformados por troncos pequeños a grandes que tienen un diámetro superior a las 8 pulgadas.
En el siguiente recuadro te mostramos con más detalle lo expuesto arriba.
Clase de combustible | Diámetro en pulgadas | Descripción | Incidencia en el comportamiento |
---|---|---|---|
1 hora | 0.00 a 0.25 | Hierbas, ramitas, agujas, musgo, líquenes y arbustos pequeños | Prende con facilidad. Promueve la propagación inicial del fuego y la combustión/calentamiento de los combustibles. Bajo condiciones secas, los combustibles provocan un flash y los incendios de superficie se extienden con rapidez. |
10 horas | 0.25 a 1.00 | Ramas pequeñas y arbustos | Facilita la propagación del fuego y el calentamiento/ combustión de combustibles grandes. En condiciones muy secas, la difusión se acelera. |
100 horas | 1.00 a 3.00 | Ramas de tamaño mediano | Promueve la difusión del fuego y la combustión/ calentamiento de los combustibles grandes. |
1000 horas | 3.00 a 8.00 | Ramas grandes y troncos pequeños | Favorece la propagación del fuego. Aumenta la duración del evento e influencia la severidad del mismo en función de la carga. |
10,000 horas | 8.00 o más | Troncos caídos y grandes que muestran solidez o un leve deterioro | Comienza a arder luego que pasa el frente en llamas. Aunque los elementos grandes no favorecen la expansión del fuego, pueden aumentar la duración y la severidad cerca de los troncos. Cuando la carga de combustible es alta y está distribuida a lo largo de la zona, la severidad alta del fuego puede propagarse más y puede elevar la duración o la resistencia al control. |
Troncos pelados y muertos (snags) | Varía | Tronco solo o con ramas grandes, dependiendo de la condición del árbol muerto | Cuando estos árboles arden, actúan como antorchas, enviando brasas en frente del incendio principal, lo que genera focos nuevos. Los snags dificultan más el control. |
Referencias
Hal E. Anderson. Aids to Determining Fuel Models For Estimating Fire Behavior. Abril, 1982, del Departamento de Agricultura de Estados Unidos. Sitio web: https://www.fs.fed.us/rm/pubs_int/int_gtr122.pdf